
Trinidad y Color
Hay momentos en que uno está sólo, viviendo cierta experiencia, porque debe ser así. Pero éste no es uno de esos momentos; este es uno en donde se expresa el deseo de compartir, de gozar y expresarse al lado de los otros, honrando a la Madre Naturaleza en su mismo seno. Son tres, el número de la compleción de las cosas: la Trinidad.
Quizá sean una madre y sus hijas, o ni siquiera sean parientes; no importa. Lo que verdaderamente importa es lo que está detrás de sus rostros de serena alegría, el afecto detrás de sus miradas, unas miradas que, desde un lugar geográficamente lejano, se dirigen personalmente a cada uno de nosotros. Y esos rostros dicen: "ven con nosotras, eres aceptado y amado, ven". Y los cálidos y vibrantes colores cantan: "Somos una expresión del Amor de Dios, existimos por tí y para tí, gózanos y abre tu mirada para percibir lo que realmente somos, y lo que realmente eres".
Y la invitación es adentrarse en ese océano de benevolencia que nos une, ligados por una red de sonrisas y miradas, honrando el milagro de la Vida, y reconociendo que todos somos Uno.
Julio 2017