Pinceladas

Africa tiene un sueño…pero ese sueño aún no pudo desplegar sus alas y volar…no con ese pesado cántaro con el que ha de cargar. Sí, parte de ese peso le corresponde, pero…¿cuánto se debe a la acción de Occidente?

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Así y todo, Africa vive, sufre y ríe en su inmenso y variado territorio, como si supiera algo que nosotros ignoramos. Ese algo que hace que esta mujer sonría imaginando a sus hijos absortos cuando, al caer la noche, ella les cante las canciones que su madre le enseñó…de generación en generación, una esperanza, un deseo de una vida mejor.

El sueño de Africa no es solo prosperar, ni un mejor futuro para sus hijos…es que permitamos que esté en nuestros corazones, y nosotros en el de ella…que nuestro encuentro como iguales elimine todo lo que impida su vuelo, pues no hay peso que pueda con el deseo de ser amor y expandirse.

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Julio 2017